Ikaro

Para Darla con Cariño... Despues de todo eres la única que la entenderá XD.

"Dédalo se puso a trabajar para fabricar alas para él y su joven hijo Ícaro."

Ikaro se veía desmejorado, sus ojos tenían prominentes ojeras, su cabello rojo vivo ahora se veía opaco, su piel más pálida que una hoja blanca, su ojos irritados y de vez en cuando un bostezo escapaba de su boca.

-con un demonio Ika tienes que dormir algo

Dice Marcela mirando la pinta con que el pelirrojo está sentado frente al computador, en tres días no se ha movido, ha estado frente a la pantalla tratando de sacar una solución a su problema, y como en muchas ocasiones la sugerencia de la chica es totalmente ignorada, Ikaro está metido en lo que escribe, e ignora todo su mundo.

-suficiente

Dice la chica al momento que camina hasta el pelirrojo, que continúa escribiendo en trance, pero justo cuando está por apagar el computador el otro chico que vive con ellos la detiene y mirándola fijamente a los ojos mueve la cabeza en forma negativa.

-que pasa

Cuestiona la chica y entonces Mika le enseña la triste realidad, a pesar de que los dedos de Ikaro se mueven de un lado al otro ya no están escribiendo nada, solo rosan las teclas sin presionarlas, y el chico tiene la mirada perdida.

-lo he visto desde antes, siempre ha tenido problemas, olvidos importantes, aun que parecía que era por descuido, eran olvidos muy importantes como para solo ser por distracción, apraxia, por eso ya no amarraba las cosas, ya no cocinaba, y por su afasia y dislexia dejo de dar cursos y de escribir fuera del computador, además de que ya no tenía orden en sus cursos o sus acciones...

La chica giró el rostro y corrió hacía su habitación, no quería aceptar que Ikaro se había ido, Mika miró a la chica con tristeza, y colocó su mano en el hombro del chico que continuaba fingiendo escribir.

-espero que tu mundo sea mejor que este.

Ikaro por un segundo pareció sonreír, pero fuera de eso ya nunca hiso nada más, esa tarde fueron por él, se lo llevaron Marcela nunca lo volvió a ver, pero Mikael siempre los lunes al Sanatorio para ver a Ikaro y platicar con él, aun que la mente del pelirrojo ya no estuviera ahí.

"Dédalo advirtió a Ícaro que no volase demasiado alto porque el calor del sol derretiría la cera"

Raven miraba el escritorio donde Ikaro acostumbraba escribir, por un segundo recordó al pelirrojo, habían pasado tres meses desde que había dejado ese mundo, Ikaro decidió volar, no hacia su destino si no mucho más allá, desde su partida las reuniones imprevistas con Jonny eran más constantes, hasta el punto de que ambos chicos se habían hecho amigos.

-lo extrañas

Cuestionó Jonny, conocía la historia de Ikaro, bueno no toda, para él solo se fue de ciudad, después de todo como explicas que tu novio podía viajar entre diferentes dimensiones.

-algo

Contesta Raven a la pregunta del chico, pero quitando aquella mueca melancólica de su rostro, para después voltear a ver a Jonny, tomar su chaqueta y salir juntos por un café.

"ni demasiado bajo porque la espuma del mar mojaría las alas y no podría volar"

-cuanto tiempo vas a estar aquí, creí que usarías a Ian y obtendrías tu poder, llegarías a Adán y...

-todo terminaría

Ikaro termina la frase del Sol, Railer sonríe mientras se acerca a acariciar la frente del otro chico.

-si te quedas mucho tiempo tus alas ya no servirán, y te quedarás en mi mundo para siempre

-lo sé, pero esa es mi decisión

Dice Ikaro seguro de sí, y Railer ve como la historia se repite tal y como quería, siempre que Ille ama al Adán, Narciso siempre ganara.

-bien, disfruta tu nuevo hogar Ikaro, o quieres que te llame como tu padre, no tardaras en parecerte a él.

Dice con maquiavélica sonrisa el pelirrojo, en un movimiento ha hecho el cabello de Ikaro de un color morado y sus ojos color violeta, con el Adán en otro mundo y el descendiente de Ille encerrado junto al Sol, Narciso a ganado, aun que en otro mundo eso signifique ser todo y nada...

"entonces el muchacho comenzó a ascender como si quisiese llegar al paraíso. El ardiente sol ablandó la cera que mantenía unidas las plumas y éstas se despegaron. Ícaro agitó sus brazos, pero no quedaban suficientes plumas para sostenerlo en el aire y cayó al mar"

Mikael mira a Ikaro sentado en aquel sillón de la orilla este del edificio, con el sol que entre por la ventana dándole en el rostro, haciendo que el pálido chico pareciera hecho de oro, Mika sonríe ligeramente mientras deja la institución mental, mientras no puede dejar de pensar que su amigo es prisionero de los demonios de su mente.

"Dédalo llegó sano y salvo a Sicilia bajo el cuidado del rey Cócalo, donde construyó un templo a Apolo en el que colgó sus alas como ofrenda al dios."