10 de enero de 2009

Dead and Love

No puedo morir... no, No moriré, cuando he esperado tanto por este momento.

La luz al final de aquel túnel se hace cada vez más y más grande, él siente la calidez aun en sus labios, sabe que no puede morir, que no lo quiere y no será así, él no morirá.

-Deprisa

Los médicos corren de un lado al otro, la camilla le lleva de un lugar a otro, está delicado, ha perdido mucha sangre y sus signos son débiles y aun así son estables.

-No puedo morir

Dice el joven tendido en aquella cama del quirófano, todo el equipo se sorprende de que hable, está más del otro lado que de este, sin embargo esa frase los hace saber que no es posible darse por vencido.

-él está luchando, vamos muchachos

Dice el médico mirando a los ojos cerrados del malherido, fuera en la sala de espera un hombre aguarda intranquilo, aun tiene ese dulce sabor a miel que se entremezclaba con el de la sangre.

-vive, tienes que vivir

El varón deja caer un par de lágrimas al suelo, está solo, pero por otra parte su corazón está en ese quirófano.

-esto es imposible

Dice el médico cuando ve la magnitud de la herida, es imposible que siga con viva.

-Es un milagro

Dice una enfermera al ver la expresión del médico, los signos siguen bajos pero estables, sigue luchando y los médicos asombrados intentan hacer lo mejor que pueden.

-No moriré, soy Eterno, como el sol, como nuestro amor.

El médico aparece en la sala de espera, se acerca al joven que aguarda impaciente, le mira a los ojos, ve su preocupación, ve su dolor.

-Está estable, pero la herida fue muy grave, estará en observación, pero no tenemos muchas esperanzas.

Miente, ni siquiera puede entender cómo es posible que siga con vida, aunque una parte de él sabe que es por aquel varón que no sabe si sonreír o llorar.

-te amo, no me dejes

Dice mientras sostiene la mano del otro y por un instante siente como esta le presiona con suavidad.

"No moriré, no ahora que tengo lo que tanto he deseado.